¿Te han contado que la mejor forma de tomar B12 es con un suplemento de Metilcobalamina? ¿o de Cianocobalamina? En este artículo te explicamos qué dice la ciencia al respecto.
La vitamina B12 (o cobalamina) desempeña funciones fundamentales en nuestro organismo a través de procesos que requieren una replicación celular intensa como, por ejemplo, la formación de nuevos glóbulos rojos. Además también participa en la formación de la denominada vaina de mielina, que recubre las células nerviosas, y que es esencial en la transmisión del impulso nervioso1.
La metilcobalamina es una de las formas activas de vitamina B12 y se ha propuesto que ingerir suplementos de B12 bajo dicha forma química es ventajoso. Esta idea se basa en la suposición de que, al ser una forma activa, la metilcobalamina ingerida podría actuar directamente, sin necesidad de ser procesada en nuestro organismo.
Sin embargo, los estudios científicos (1,2,3) realizados al respecto revelan que todas las formas de vitamina B12 que ingerimos siguen un mismo proceso de transformaciones químicas en nuestro organismo. Dicho proceso reduce cualquier forma de vitamina B12 a cobalamina, para convertirla posteriormente en las formas activas de vitamina B12, como la metilcobalamina. Además, la evidencia actual indica que todas las formas de vitamina B12 se absorben en el intestino con una eficiencia similar (3). Por lo tanto, y a la luz de esta información, no existen razones para justificar la preferencia de la metilcobalamina frente a la cianocobalamina como suplementos orales (1,2,4)
A esto hay que sumar cuestiones relacionadas con la estabilidad de la sustancia, su seguridad de uso y el nivel de conocimiento que existe sobre la suplementación a largo plazo: no existe información suficiente para determinar las dosis más seguras y efectivas de metilcoabalamina (1,4) Por el contrario, la cianocobalamina es la forma de B12 más estudiada y se ha concluido que se trata de una sustancia muy segura incluso a dosis altas (5). Además, la cianocobalamina es la forma de B12 más estable frente al calor, la luz y el pH (1,4,6)
En conclusión, la metilcobalamina es una opción secundaria para suplementación oral de B12 dada su menor estabilidad y la escasez de información científica sobre su seguridad a largo plazo; además, aunque sea una forma activa de B12, sigue los mismos procesos de transformaciones químicas en el organismo que cualquier otra forma de vitamina B12, anulándose así su supuesta superioridad. La cianocobalamina, sin embargo, es la forma más estable, la más estudiada y segura a largo plazo incluso a dosis altas, y se absorbe y procesa en nuestro organismo con igual eficiencia que otras formas de B12. Por lo tanto, la cianocobalamina se convierte en la elección predilecta como suplemento oral de vitamina B12.
Referencias bibliográficas
https://veggunn.com/suplementos-de-b12-metilcobalamina-o-cianocobalamina/